Por José Luis Casal

Senior Advisor. Experto en modelos de negocio digitales

@jlcasal

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El rápido auge de ChatGPT ha generado expectación, horror y esperanza sobre el potencial de la inteligencia artificial a partes iguales. Y para muestra…

Los expertos advierten de que la IA puede acabar con el empleo y aumentar la desigualdad’ (The Guardian).

El CEO de Microsoft afirma que la IA creará más puestos de trabajo’ (CBS).

6 trabajos que la inteligencia artificial ya está sustituyendo…’ (Yahoo Finanzas).

Cómo la inteligencia artificial puede impulsar la diversidad y la inclusión’ (Forbes.com).

¿Puede la inteligencia artificial ayudar a detectar el cáncer de pulmón?’ (Healthline.com).

Y mi favorito: ‘¿Pueden las palomas igualar el ingenio de la inteligencia artificial?’ (Science Daily)


Y si vemos el enorme avance que ha supuesto los recién presentados GPT4 y Midjourney v5…. ¡de locos!

ChatGPT, una aplicación de IA que permite a las máquinas escribir y responder de forma increíblemente humana, alcanzó los 100 millones de usuarios en menos de dos meses

Esto la convierte en la aplicación de más rápido crecimiento de la historia, según un informe de UBS citado por Reuters. Para que os hagáis una idea, TikTok tardó nueve meses en alcanzar el mismo número de usuarios; Instagram, dos años y medio.

¡Hasta ha sido ya, portada de TIME!

En un mundo cada vez más impulsado por la inteligencia artificial, necesitaremos a los humanos al volante más que nunca.

En resumen, ChatGPT y otras herramientas de IA parecen estar en todas partes y se consideran desde un regalo inestimable hasta una amenaza existencial.

Está claro que aún estamos en las primeras fases del «hype cycle«, tanto de expectativas infladas como de temores. Pero de esto podemos estar seguros: en un mundo cada vez más impulsado por la inteligencia artificial, necesitaremos a los humanos al volante más que nunca tal y como hablé por aquí no hace mucho.

Sin duda, sería mucho más inteligente aceptar el auge de la inteligencia artificial como un hecho, y luego dedicar esa energía a encontrar formas de integrarla en nuestras vidas de manera productiva y positiva.

La historia incluye muchos casos en los que la tecnología crea tantas ocupaciones como las que elimina

Lo que es diferente esta vez es que los robots no sólo están en las fábricas, sino que se dirigen a las oficinas, ya que los sistemas de IA se solapan con las tareas que ahora llevan a cabo contables, abogados y otros profesionales con formación universitaria. Con lo que eso de que sólo sustituirán trabajos repetitivos, aburridos y sucios… y ya si le preguntas a él…

¡Pero seamos listos! Aunque sólo sea por esta vez…

Lo ideal es mejorar nuestra capacidad para trabajar con esta tecnología. Eso significa reorientar nuestros esfuerzos educativos para desarrollar mejor las habilidades para hacer las cosas que las máquinas no pueden hacer, el material exclusivamente humano de la imaginación, la creatividad, la empatía y la ética.

La enseñanza superior se encuentra en una encrucijada. Por un lado, preocupa que los estudiantes puedan encargar fácilmente trabajos escritos por robots. Como dice EdSurge, «ChatGPT tiene a las universidades en modo de emergencia para proteger la integridad académica».

Pero por otro, también hay oportunidades: ya existe un programa impulsado por inteligencia artificial, obra de un estudiante de último curso de Princeton, para detectar la escritura hecha con IA, lo que puede marcar el comienzo de una carrera armamentística sobre la honestidad académica. 

Aparte de la escritura robótica, la IA ofrece la promesa de asistentes digitales que pueden aumentar la productividad en muchos campos

Y en un mundo de interacciones cada vez más mediadas por máquinas, las habilidades duraderas que definen las contribuciones humanas, como la creatividad, empatía y pensamiento crítico, entre otras, tienen cada vez más importancia.

Incluso antes de la llegada de ChatGPT nuestro sistema educativo se enfrentaba al reto inminente de prepararnos para un futuro que ya está aquí, pero que parece que no interesa, no importa o que tiene otras prioridades más ideológicas que tecnológicas.

Los institutos y universidades están en una posición única para ayudar a los estudiantes a desarrollar esas habilidades a través de cursos de redacción y comunicación, resolución de problemas en aplicaciones STEM y otras áreas. Estas competencias ‘duraderas’, que creo que es mejor que llamarlas ‘blandas’, son algunas de las más demandadas por los empleadores.

Podemos esperar cambios sustanciales, y, sin duda, muchas sorpresas, a medida que se desarrolle esta tecnología, pero la IA tiene una pinta estupenda dentro de las tecnologías que pueden promover el bienestar humano

Es probable que desempeñe un papel en nuestra capacidad para hacer frente a la próxima pandemia o predecir catástrofes naturales como terremotos y huracanes. De un modo u otro, esta tecnología afectará a todas nuestras vidas.

Pero el cambio disruptivo probablemente signifique un viaje duro para muchas personas. Nos debemos a nosotros mismos y debemos apostar por tener la formación necesaria para satisfacer las nuevas necesidades de talento. 

Hay oportunidades en medio de todo este cambio, muchas, pero incluso antes de la llegada de ChatGPT nuestro sistema educativo se enfrentaba al reto inminente de prepararnos para un futuro que ya está aquí, pero que parece que no interesa, no importa o que tiene otras prioridades más ideológicas que tecnológicas.

Es una tarea difícil que se ha vuelto aún más difícil. Y como me estoy metiendo en un charco. Voy a pedir ayuda.

Oye, ChatGPT, ¿tú qué opinas?

🤖  «Formar a las personas para trabajar con inteligencia artificial (IA) en el futuro requerirá una combinación de conocimientos técnicos y habilidades interpersonales».

 

Añadió que la formación para las carreras relacionadas con la IA debería incluir conocimientos técnicos y ciencia de datos, naturalmente, junto con una inclinación por el aprendizaje continuo. Pero también las máquinas, en su análisis del vasto conjunto de datos utilizado para ChatGPT, recomiendan hacer hincapié en lo que consideramos habilidades humanas. No es listo ni ‘ná’.

🤖 «A medida que la IA afecta cada vez más a la sociedad, es importante que las personas comprendan las consideraciones éticas y el potencial de sesgo de los sistemas de IA»

🤖 «Las habilidades de colaboración y comunicación son esenciales para las personas que trabajan en IA, ya que tendrán que trabajar con una variedad de partes interesadas, incluidos los equipos técnicos y no técnicos, así como los clientes y las partes interesadas«.

Sí, parece que en esto, nosotros y las máquinas podemos estar de acuerdo. 

 

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